miércoles, 29 de febrero de 2012

ABUELOS Y NIETOS





La mayor esperanza de vida así como los complicados horarios laborales de los progenitores han hecho que, actualmente, los abuelos sean unos segundos padres que pasan mucho tiempo con sus nietos, cuidándoles, educándoles y mimándoles. La diferencia generacional hace que no siempre sea fácil la relación; por eso, para fortalecer estos lazos, es muy recomendable que compartan actividades divertidas en las que ambos se sientan a gusto


¿Qué aportan los abuelos?

Para que haya una buena relación entre unos abuelos y sus nietos, es fundamental que se entienda que el niño no es una segunda oportunidad para representar el papel de padres, sino que ahora tienen que desempeñar unas nuevas funciones. Su rol no es el de educar, sino el de mimar, cuidar, proteger, enseñar…

Aunque no todos los abuelos son iguales, ni todas las relaciones se pueden comparar, el papel de los abuelos es distinto al de los padres y la relación de apego que se forma con ellos es también distinta. Los abuelos suelen ser más consentidores y dan más apoyo y menos disciplina, es decir, mantienen una relación más juguetona y relajada.

Las funciones principales de los abuelos son:

- Cuidar: Muchas veces, los horarios de los padres no son compatibles con los de sus hijos –salen pronto del cole, no les pueden llevar a la guardería, tienen días festivos diferentes, etc.- y en ese momento los abuelos son una gran ayuda.

- Contar historias: Aparte de cuentos o historias inventadas, los abuelos son una fuente viva de información sobre acontecimientos pasados trascendentales que los niños no vivieron, así como de modos de vida totalmente diferentes (sin Internet) o de la historia familiar. Estas narraciones amplían la mente de los pequeños, enseñándoles que las cosas no siempre han sido como ellos las ven y que la vida a veces es difícil. Los niños disfrutan oyendo estas historias y además les ayuda a llenar el vacío entre el pasado y el presente. También tiene un efecto positivo en la relación padre–hijo cuando los abuelos cuentan a los nietos cosas de sus progenitores cuando eran niños y jóvenes, lo que hace que conozcan más del pasado de sus padres facilitando un entendimiento entre ellos.

- Jugar: Para los niños, quizá lo más importante: divertirse y disfrutar jugando con sus abuelos. Yo disfrute mucho esto con  mi abuela Gisela, era muy ingeniosa y siempre tenía un juego que inventar. Jugábamos  con las cartas, libros para pintar, peluquería, pintura en oleo, ajedrez y conocimiento de palabras simples en otro idioma.

- Transmitir valores morales: Otra función muy común es la de aconsejar, guiar, asesorar y transmitir valores morales. Deben enseñarles que no todo lo nuevo es bueno y que no todo lo viejo es malo.

- Pacificar: Los abuelos ayudan a amortiguar las malas relaciones o las dificultades entre los padres y sus hijos, sobre todo en épocas difíciles como la adolescencia. Son como un árbitro y pueden aliviar las tensiones, ya que su posición es más o menos neutral.

- Mimar y malcriar: Uno de los roles más clásicos con el que siempre se ha identificado a los abuelos: mimar a sus nietos, darles aquello que sus padres les prohíben (chuches, juguetes, dulces). Este hecho de mimar a los nietos puede tener consecuencias positivas en los niños y en la relación que mantienen, recuerdo siempre  que mi abuela Gisela cuando regresaba de su caminata diaria tenía para nosotros una bolsita con golosinas, y cuando nos quedábamos en su casa a dormir, ella permitía pequeñas cosas que sabíamos que en casa no podíamos hacer, como dormirnos tarde, comer en las camas mientras se ve la tv, jugar con agua, entre otras.

- Ayudar: Los abuelos suelen ayudar en momentos de crisis como divorcio, separación, enfermedades, problemas económicos…mi abuela siempre fue un gran apoyo.

Consejos para optimizar la relación

Un factor muy importante para que exista una buena relación entre un abuelo y su nieto es que se vean con frecuencia. Cuanto más contacto tengan, mejor se conocerán, tendrán más opciones de hablar, de contarse cosas y de realizar actividades juntos.

También es importante que tanto uno como otro se adapte a la edad que tienen. No es igual tratar con un niño de 5 meses que con uno de 5 años; pero también los pequeños tienen que ser conscientes de que sus abuelos ya no son jóvenes y por lo tanto tienen achaques y dificultades para llevar a cabo ciertas actividades.

Es importante que los abuelos estén al tanto de los gustos y deseos de sus nietos. Si al niño no le gusta el fútbol, no es buena idea que su abuelo le lleve todos los domingos al campo, ya que acabará aborreciendo las salidas con él. Además, tienen que intentar estar al tanto de las nuevas tecnologías y del estilo de vida de su nieto, ya que las cosas han cambiado increíblemente en los últimos 50 años y los niños de ahora no se divierten como los de hace unos años.

Aunque las historias que el abuelo cuente sean muy interesantes, éste también debe escuchar a su nieto y prestarle atención cuando le cuente cosas; sólo así logrará conocerle y saber cómo actuar con él.

Y, sobre todo, buscar actividades que les gusten a todos y que puedan realizar juntos para fortalecer su relación. Cuanto más te diviertes con alguien, más ganas tienes de verle y de estar con él. Aparte de pasear y jugar en el parque, pueden ir de excursión, al cine, a ver obras de teatro infantiles, a talleres de manualidades para niños y adultos, etc. Las posibilidades son múltiples y cada vez más museos, ludotecas y centros organizan actividades para abuelos y nietos.

miércoles, 8 de febrero de 2012

SAN VALENTIN CON TUS HIJOS!!


 El día del amor y la amistad ya está cerca y qué mejor manera de mostrarles cariño a nuestros hijos que pasando tiempo con ellos. Y mucho mejor si podemos hacer con ellos algo que los ayude a aprender nuevos conceptos y a expresar su creatividad.
Hoy, tengo  recetas para cocinar con tus niños  aunque parezca una simple actividad, estarás ayudando a tu hijo a comprender cómo funcionan las medidas al ayudarte a calcular las cantidades, a desarrollar su motricidad fina para decorar y a dar rienda suelta a su creatividad.

Dulces de San Valentín
Ingredientes:
  • 3 cucharadas de mantequilla
  • 40  malvaviscos grandes
  • 6 tazas de Arroz Krispies (cereales de arroz inflado)
  • chocolate blanco
Preparación:
Derretir la mantequilla en una cacerola grande. Agregar los malvaviscos y calentar hasta que se derrita, agregar los Rice Krispies. Extender la mezcla en una bandeja de hornear del alto deseado y una vez seca cortar las formas con un cortador en forma de corazón.
Insertar un palillo en el corazón. Derretir el chocolate blanco en un plato poco profundo. Sumergir una de las partes del corazón en el chocolate derretido o bien extender con una cuchara. Antes de que se derrita del todo espolvorear con decoración comestible a tu gusto.

Dulces Con forma de  corazón

Ingredientes:

7 cucharadas de gelatina sin sabor
3 tazas de azúcar
2 tazas de agua
1 taza de gelatina con sabor
azúcar para decorar

Preparación:
En una olla coloca la gelatina sin sabor, el azúcar y el agua. Lleva la olla al fuego y remueve constantemente con una cuchara de madera hasta que hierva un poco. Luego añade la gelatina con sabor. Deja hervir hasta que la mezcla espese y se forme una película en la superficie.

Moja con agua fría un molde rectangular y vierte la mezcla en éste. Déjala reposar durante toda la noche. Al día siguiente la mezcla ya estará firme
Dales formas con un cortador de galletas de  corazones. Pásalas por azúcar y déjalas reposar.

FELIZ DIA DE SAN VALENTIN!!!!!

sábado, 4 de febrero de 2012

¡¡MI HIJO NO QUIERE COMER!!



Esa frase de "mi niño no come" tod@s las hemos escuchado muchas veces, y las que nos dedicamos a esto de la educación aún mas. Pues bien hoy vamos a realizar unas recomendaciones que pueden suavizar esas palabras.
La introducción de los sólidos no es un mero capricho social, sino que cumple varias funciones importantes en el desarrollo del niño: por un lado, le permite una dieta más variada y saludable, distinguir mejor los sabores, probar diferentes texturas.
Por otra parte, la introducción de sólidos requiere de la masticación, y ésta es fundamental para trabajar toda la musculatura de la boca y de la cara, que luego será tan importante en la articulación del lenguaje. Además, es una cuestión evolutiva, para algo tenemos los dientes y las muelas, para masticar.
Teniendo esto en cuenta, es importante que introduzcas el sólido a los niños siguiendo las indicaciones de tu pediatra o del colegio (si fuese el caso), para que el niño se vaya familiarizando con las diferentes texturas y sabores.
¿Pasa algo si esperamos? Por norma general, cuanto más tardes más le costará. Imagina que al día de hoy te cambian de repente el tipo de comida. Es decir, que de comida occidental de pronto te pasan a una dieta oriental. Algunos la adaptaran sin problemas, pero otros tendrían muchas dificultades. Pues lo mismo un niño. Si lleva tres años comiendo purés y de repente le metes el sólido estará desconcertado, se mostrará reacio y sólo querrá lo conocido, que son sus purés.
Con los niños que se niegan a comer sólidos, se puede aplicar la misma fórmula del R (ritual, repetición y rutina), P (paciencia y positividad), y (mucho cariño) y a realizar entre Todos. Además, es necesario que aunque los rechacen se los sigas ofreciendo para que vaya probando. Si no quiere no pasa nada, mañana se volverá a intentar. Habrá que probar con distintos alimentos hasta encontrar sus preferidos. No vale la pena forzar, debes respetar cuando dice no. Recuerda que la comida tiene que ser un momento agradable. Por tanto no te centres en lo que no hace sino en sus pequeños logros ("¡muy bien, lo has probado!, ¡TE FELICITO!").

Estrategias:
1. Mostrarles que hay que comer de todo (no sólo lo que ellos quieren) y explicarles la importancia de la dieta equilibrada:
Podemos apoyarnos en la pirámide alimenticia.
2. Integrarlo a comer en la mesa, es importante que se sienta grande y al ver como los integrantes de la familia come, el por imitación hará lo mismo.
3. Siempre que nos sea posible, pedirles que nos ayuden en la cocina, y si lo que no quieren son verduras, meterlas en lasaña, hacer un pollo con verduras y éstas triturarlas para que ellos no las noten, etc.
4. Para comer tienen un tiempo limitado, no podemos permitir que se lleven 2 horas comiendo y que se les junte con la merienda. Para ello, podemos ponerles en la mesa un reloj y así si empiezan a comer a y media, cuando la aguja llegue al 12 tienen que haber terminado y se les retirará el plato esté como esté. Es muy importante evitar distracciones como la televisión. Mejor tenerla apagada durante la comida y concederles el premio de ver los dibujos si han comido bien.
5. Por último, recordar que es importante que coman lo que se ha acordado para ese día. Y no, que se les cambie la comida porque no les guste. Cuando pase la media hora y no hayan comido se les retira la comida hasta la hora de la merienda y comerán lo que toque para merendar, y así sucesivamente. Es importante no darles después un dulce, chocolate, o algo de comer que a ellos les guste porque nos dé pena que se queden sin comer. Ya que si les damos lo que quieren se saldrán con la suya y nos llevarán a su terreno.